El descubrimiento de la radiactividad
Nunca vemos lo que está hecho,
sino lo que queda por hacer
Marie Curie
Diríase que el descubrimiento de la radiactividad ha sido en la ciencia cosa de familia. Aunque la paternidad de este hallazgo debe atribuirse, con toda justicia, al ingeniero francés Henri Becquerel en el curso de sus investigaciones sobre la “fosforescencia” del material de uranio, el apellido Curie está unido indisolublemente a la historia de los primeros tiempos de la radiactividad.
La polaca Maria Slodowska, nacida en 1867, se había instalado en París a principios de la década de 1890 con apenas 24 años de edad. Dedicada en cuerpo y alma al estudio y la especulación científica, vivió pobremente hasta obtener el número uno en la licenciatura de ciencias físicas por la Universidad de París, y se unió al laboratorio dirigido por Pierre Curie, con quien contrajo matrimonio en 1895. Los “rayos Becquerel”, descubiertos al año siguiente, fueron motivo central de su tesis, en el curso de la cual convenció a su esposo para investigar la posible existencia de nuevos elementos químicos. El hallazgo del radio y el polonio abrieron a la pareja las puertas del Premio Nobel de física, que les fue concedido en 1903 en compañía del propio Becquerel.
Tres años después, Pierre Curie tuvo una muerte trágica e instantánea al ser arrollado por un coche de caballos. Su esposa, conocida ya para siempre en los anales científicos como Marie Curie, prosiguió notables investigaciones que la hicieron merecedora de un nuevo Nobel, esta vez de química, en 1911. Aún tuvo tiempo Marie, antes de fallecer en 1934 por una anemia perniciosa atribuible a sus largas exposiciones a radiaciones ionizantes, de impulsar y apoyar con su esfuerzo personal la exitosa carrera científica de su hija Irène. Desposada con Jean-Frédéric Joliot, Irène compartió con su marido el Premio Nobel de química de 1935 por su descubrimiento de la radiactividad artificial y por la síntesis de nuevos elementos radiactivos. Lo dicho, casi un asunto de familia.
- Referencias:
- En los recursos online de la Fundación March puede accederse a un documento gráfico sobre la vida, el tiempo y la obra de Marie Curie (http://recursos.march.es/culturales/documentos/conferencias/pp2848.pdf). Puede revisarse también la reseña sobre la científica polaca que se ofrece en la página de los Premios Nobel (http://www.nobelprize.org/nobel_prizes/physics/laureates/1903/marie-curie-bio.html). Laura Vargas Parada ha publicado en la Revista Digital Universitaria de la Universidad Autónoma Nacional de México (UNAM) el artículo “Marie Curie: la dama del radio” (http://www.revista.unam.mx/vol.12/num10/art89/art89.pdf). Se aconseja también la animación TED “La genialidad de Marie Curie”, de Shohini Ghose (https://www.ted.com/talks/shohini_ghose_the_genius_of_marie_curie?language=es).